Sin tiempo

Llevo unos días trabajando un montón de horas con mi octavia, con lo cual, el tiempo libre que tengo en casi nulo.

Intento escribir en las paradas, o sentarme el poco rato que me queda delante del ordenador, cuando el silencio y la noche envuelven el ambiente, pero el cansancio me puede y las ideas deambulan por mi mente sin que consiga organizarlas.

Si pudiera tener más tiempo, o si se pudiera comprar, buen gasto sería...disfrutar de un ocio ahora esquivo, y multiplicar las horas de sueño ansiado y reparador... Sólo de pensarlo me brota una media sonrisa y se me cae un párpado de plomo.

El tiempo apremia, es oro, y se va como agua apuñada entre las manos. Pasan los minutos, las horas, los días, y te das cuenta que hay que aprovechar cualquier segundo que se respira.

Es un tren que no espera.

Y eso que hay estaciones en las que querrías detener el tren y que no partiese nunca, momentos tan gratificantes que te gustaría que no se terminaran, sensaciones al fin halladas y prolongarlas hasta el infinito en un continuo presente.

Pero como no se para, no se vende en tiendas y no conocemos al tal Cronos que dispone de él, tendré que conformarme con las pírricas 24 horas que tiene el día y organizarme lo mejor que pueda.

Si sabéis algún truco, decírmelo; y no cuenta no dormir.

Buena Caza!!