2 de abril de 2012
Taxista de interiores
Pudiera ser taxista de destinos, pero me gusta más de interiores... desnudar las almas y llegar a esos entresijos que tapan vuestras fachadas.
Y entre tanto supe que habías leído mi post y en tu mirada emparejada a mi espejo busque la respuesta.
Esos ojos marrones que tu pupila cubría de negro engaño lo que divisaba.
Escapabas del presente y por qué no del pasado cercado por tu angustia.
Lástima que te descubrí, no pude obviarlo.Te sobraban motivos y te faltaban fuerzas.
Si, tú eras uno de ellos, un tipo Art Deco que no contento con actualizar las apariencias, y engañarte a ti mismo, pensabas que mientras echabas de menos tu palestino y esos vaqueros rotos los demás se tragaban tu discurso barato de auto convicción.
Asomaban tus graffitis de adolescente y tapaban tu falsa sonrisa. Te robaron el sueño y tus ganas.
En cada semáforo dejabas un ladrillo para subir tu muro.
Entonces, hablaste por la boca y tus ojos dejaron de susurrarme.
-"Corre, que no llego"
-"Necesito volver al punto de partida"
Hice un cambio de sentido y lanzaste desde la ventilla la cobarta contra un agente de movilidad y sonreiste.
No necesitaste un intercambio de palabras... solo Buena Caza!!!
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8 comentarios:
Puedes volver a engañarme... me dejo.
Traductora de miradas a tiempo parcial.
Un minuto muy intenso...
Ese momento,tan especial,tan intimo.Se comparte algo mas que el aire que se respira ,en un espacio tan reducido.Vuela la imaginación....las preguntas....las respuestas.....las soledades ...nuestros miedos.....
Toda una aventura.
¡Qué guapa estás!
Un besazo!
Me gusta ese espejo tuyo que se deja engañar ;-D
Un beso.
Y mis interiores con vosotros se llenan aún más.
Muy Sabina, siempre que te leo me parece eschurle en una canción
La foto muy guapa.
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