Javier Fernández Díaz, de 30 años, desapareció en la noche del pasado miércoles, 20 de Octubre, tras haber aparcado el taxi en el que trabajaba (era asalariado) en su garaje de Río Caudal a las doce de la noche. Fernández Díaz aparcó el vehículo en la plaza del dueño de la licencia y apagó el taxímetro. Se supone que el conductor se subió en ese momento a su vehículo particular, un Seat Toledo, con la recaudación del día, y que puso rumbo a su casa, en la zona alta de General Elorza.
Centenares de taxistas se concentraron ayer al mediodía, hasta la una de la tarde, en la explanada del nuevo Carlos Tartiere en apoyo a la familia del compañero desaparecido, el joven Javier Fernández Díaz, del que no se tiene noticia desde la noche del pasado miércoles.
En su entorno nadie se explica qué ha podido suceder. Así, los familiares descartan casi por completo que Javier Fernández haya podido desaparecer por voluntad propia. Acababa de regresar de pasar unas vacaciones con su pareja en Canarias y su vida discurría, al menos en apariencia, con total normalidad.
Según ha podido saber LA NUEVA ESPAÑA por fuentes próximas a la investigación, el último turno de Javier Fernández Díaz no fue una jornada de trabajo habitual. Realizó cuatro servicios largos, un número no muy frecuente para un miércoles por la tarde. Hizo un viaje al aeropuerto, otro a Gijón y dos a Langreo.
Su coche es un seat Toledo gris oscuro 9466 CWN. Si lo ven avisen a la policía.Gracias
Buena Caza!!!
3 comentarios:
Espero que tenga un final feliz. Pero hay que ser realistas, quizás la recaudación fuera antojo de un ladrón...ojalá me equivoque.
Con la crisis, somos blanco fácil.
Gracias x la info...estamos en ello desde Navarra, a ver si hay suerte.
La Policía Nacional ha encontrado en la provincia de Lugo al taxista Javier Fernández Díaz, desaparecido el 21 de octubre en Oviedo. Siempre según fuentes policiales, el hombre se encuentra en perfecto estado de salud y aún no han trascendido las causas por las que decidió huir.
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