4 de diciembre de 2016

Y estamos en Otoño







Y aún sigo cosiendo los retales del alma,
y no cicatrizan las huellas.

Mientras el pasar de los años posa cual instantánea onírica,
y siempre es Otoño.

Y bajo el dorado otoñal envuelto de nostalgia y alegría,
un Ángel me susurra al oído.

"Soy feliz, tuve que aprender a convivir con la paciencia,
la misma que me recuerda que todo llega, mi Ángel".



Buena Caza!!